Se compran lagrimas
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- LAGRIMAS
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- Se compran lágrimas escena #1
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- Se compran lágrimas escena #2
- Se compran lágrimas escena #3
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- Frente a la última casa del pueblo y enmarcando todo lo ancho de la calle, se extendía un paño blanco que, en letras negras, decía: “¡Se compran lágrimas!”.Aquella casa estaba siempre cerrada y sólo por las tardes se abría esquivamente para dar entrada a un sirviente, hombre de edad, que llevaba a su amo, en dos garrafas, lo que había conseguido, yendo de casa en casa.
- Se compran lágrimas escena #4
- me encanta la de madres dolientes y bebes ...... mmmmmmm deliciosas....
- El sirviente fue de casa en casa en el pueblo comprando lagrimas para su amo las de bebes y madres dolientes eran las que le fascinaban a su amo
- Se compran lágrimas escena #5
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- Era éste un hombre misterioso, alto y duro de facciones. Parecía pedernal tallado en aristas con lejana forma de hombre. Unos ojos extraños le brillaban a la sombra de sus pestañas con resplandores siniestros, como dos esmeraldas.Aquel hombre pagaba muy bien el agua amarga que le llevaba su servidor. ¿Para qué las quería? Nadie lo sabía a punto fijo.
- Se compran lágrimas escena #6
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- Otros suponían que era un sabio que trataba de fabricar, con lágrimas, el elixir de la vida. Y todos opinaban distinto y cada uno iba tejiendo, sobre el solitario y miedoso negociante, una historia sorda y opaca.Aquel solitario mudo cataba con placer toda clase de lágrimas. En una copa de plata, las paladeaba casi con sensualidad y distinguía toda especie de llantos con la habilidad de un buen conocedor de vinos.
- LAGRIMAS
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- Por la puerta del viejo excéntrico pasaban todos los días, camino de la escuela, dos rapaces. Iban siempre rocheleando y retozando por media calle, felices y floridos. Cuando veían el letrero del comprador, se decían invariablemente: “¿Cuándo tendremos lágrimas para venderlas y comprar frutas?”. Porque cerca de la casa del comprador había una surtida venta de manzanas. Pero aquello era quimérico. ¡Qué iban a tener ellos ni una lágrima, a los once años, riéndose por todo,
- se compran lagrimas
- Uno de los acólitos notó un día, al colocar en su puesto el reclinatorio del cura, que la tabla del antepecho estaba húmeda de lágrimas. Llamó al compañerito y le dijo triunfal:- ¡Albricias, chico, lágrimas tenemos!Las del señor cura, que se están miserablemente perdiendo.
- Se compran lágrimas escena #7
- Se compran lágrimas escena #8
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- Se compran lágrimas escena #9
- Al día siguiente el párroco vio, con cierta extrañeza, una almohadilla en la tabla de apoyo del reclinatorio. Y el cura, hombre duro, hecho a todas las desgracias, empapaba la almohadilla de su reclinatorio con lágrimas.
- Se compran lágrimas escena #10
- son las mas exquisitas y deliciosas lagrimas que he probadoJAJA-JUA.JUA-JUA-JAJAJA
- Cuando al mucho rato el sacerdote se retiró, los dos mocetes cayeron, ávidos, sobre la almohada húmeda y corrieron donde el negociante de lágrimas.
- Se compran lágrimas escena #11
- Se las pagó a precio de oro y exprimió con ansiedad el paño sobre la copa de plata. Y bebió. Había bebido de las lágrimas más exquisitas que se producen en la Tierra; lágrimas tan finas y tan añejas como las lágrimas de las madres dolientes. Era un gran catador.
- CONCLUSIÓN
- Este cuento genera una gran reflexión, en el mundo actual vemos una sociedad dura, soberbia, cruel e insensible, en donde se alimenta del dolor ajeno y a veces la gente paga por esto a un beneficio propi, deja a un lado los valores y enseñanzas dadas por la palabra de Dios, y no hacemos una reflexión interna de cada uno.El sacerdote hace una reflexión al sacrificio hecho por Jesús y el significado de el verbo de Dios, en donde concluye a que el mundo no toma el sacrificio hecho por Dios al entregarse y crucificarse, y así lavarnos de nuestros pecados. Los valores que encontramos en este cuento es el altruismo, compasión, esfuerzo, misericordia, sacrificio y voluntad.
- ¡Pero no había comparación! Estas que le habían traído los muchachos eran soberbias. Le causabellas, en sus labios se dibujó una sonrisa cínica y en toda la estancia resonó una carcajada seca y fría.
- LAGRIMAS
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- Aquellas lágrimas que bebía eran las mejores para sus labios y para su alma egoísta. Aquel hombre, cruel y malo, tenía un nombre misterioso y lleno de alusiones, llamábase el señor Mundo.
- Dicen que le llaman el señor Mundo
- Que señor mas terrorífico y extraño
- se compran lagrimas
- Actividad 4Jean Marco Ortega Joya ID:880727Catedra minuto de Dios - Geovanny Felipe Colorado González
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