A los pies de la montaña se encontraba un palo de telégrafo, a Rosa y a Pinin les causaba mucha curiosidad el ruido que hacía pero a la Cordera no tanto
Podría escuchar este ruido tan misterioso por horas
En el prao Somonte vivían los hermanos Pinin y Rosa con la Cordera.
Mira el poste Vaca Abuela
Esa cosa muerta no me sirve ni para rascarme
Todo era paz en el prao hasta que llegaron los días de prueba de la inauguración del ferrocarril y quedaron sorprendidos.
¡Corran por sus vidas!
¡QUE GENIAL! Nunca había visto uno
Madre y esposa
Chinta
¡Mamá!
Tras la pérdida de su madre, la Cordera había tomado el papel de madre / abuela.
La madre de estos niños había fallecido a los 2 años de tener a la Cordera. Segundos antes de la muerte señaló a la Cordera como salvación de la familia.
Por la necesidad que tenía la familia, Antón de Chinta llevaba a la Cordera para venderla, pero quería tanto a sus hijos que elevaba demasiado el precio para no venderla, hasta que un comerciante borracho superó esa cantidad.
¡Dame los cincuenta mil por la vaca, ni una moneda menos!
¡Te daré sesenta mil por la vaca!
El viernes fue la despedida, llegaron a llevarse a la Cordera y los niños se arrojaron sobre su amiga para darle besos y abrazos momentos antes de que se la llevaran.
¡ADIOS CORDERA!¡ADIOS CORDERA DE MIO ALMA!
¡ADIOS CORDERA!.¡ADIOS CORDERA!
Después de todo lo sucedido, Rosa comenzó a mirar con odio las vías del tren, el palo del telégrafo. Era el mundo desconocido quien se había llevado todo....
¡Adiós Rosa!
¡Adiós Pinin!¡ADIOS CORDERA!¡Adiós Pinin de mio alma!
Pasaron muchos años, Pinin se hizo mozo y se lo llevó el rey a la guerra. Rosa tuvo que despedirse de su hermano y se quedó sola.