Por fin Geppetto y Pinocho estaban nuevamente juntos!Ahora debían pensar cómo conseguir salir de la barriga del megalodon.
¿Cómo vamos a salir de aquí?
¡Papá!
¿Piocho?
No te preocupes, ya se que podemos hacer. Lo bueno es que estas bien, ven, ayúdame a hacer una fogata.
El fuego hizo estornudar al megalodon, y la balsa salió volando con sus tripulantes.
¡ACHUUU!
Después de eso Pinocho y Geppetto llegaron sanos y salvos al puerto
Shshsh, está bien Pinocho, te perdono, lo bueno es que te tengo conmigo otra vez, hay que olvidar todo esto y empezar de nuevo.
Perdón papá, se que estuve mal, fui egoísta y malo, no debí irme y debí hacerle caso al escarabajo.
Pasado un tiempo, Pinocho demostró que había aprendido la lección y se portaba bien: iba al colegio y ayudaba a su padre en todo lo que podía.
Pinocho
Como recompensa por su comportamiento, el hada decidió convertir a Pinocho en un niño de carne y hueso. A partir de aquél día, Pinocho y Gepetto fueron muy felices como padre e hijo.