¡EUREKA!, Muchas gracias por sus aportaciones caballeros, han generado un conocimiento irreplazable para la historia de la humanidad.
Mi experimento consistió en colocar un caldo nutritivo en una botella que después calenté para proceder a sellarlo. Al pasar de los días, logré encontrar presencia de vida en el caldo por lo que concluí que, efectivamente, la vida se había creado de un compuesto no viviente.
Vaya que vive una mentira...
Por fin llegó el momento de la verdad. Un placer, mi nombre es Lazzaro Spallanzini y en la década de 1760 refuté a Needham a través del mismo experimento comparando dos situaciones posibles adversas.
Concisamente, coloqué en dos botellas caldos nutritivos que calenté hasta hervir y procedí a cerrar solo uno, el otro lo mantuve destapado. Es decir, desmentí "La Generación espontánea" en el mismo experimento que buscaba comprobarla.
¿Por qué tantos tuvieron que tacharlo de farsante con el argumento de que el aire podría ser un ingrediente indispensable?
Llego el momento que los hechos hablen por sí solos. ¿Qué tal?, mi nombre es Luis Pasteur y en el año de 1761 volvía a repetir el dichoso experimento de los caldos pero con una conclusión realmente exitosa.
Hablando de forma precisa, coloque en dos precipitados de cuello de cisne los caldos nutritivos, los dejé hervir el tiempo exacto para que toda presencia viva dentro pudiera desaparecer y los dejé reposar. En todo momento el caldo se mantuvo en contacto con el aire pero a través de la filtración propiciada por el recipiente nunca lograron ingresar los microorganismos, así, la teoría "Biogenista" resultó triunfante.