CONQUISTA DE MEXICO
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- Buenas tardes señor Cortes, le quiero comentar acerca de la ciudad de Tenochtitlan. le gustaría saber de este lugar, es que nosotros queremos destruir esa ciudad.
- ¿Qué dijo el señor Hernán Cortes?
- ¿Qué quieres hablar conmigo Cortes?
- Esta ciudad nosotros lo queremos destruir desde hace muchos años, y queríamos que usted se nos una para que destruyamos juntos esa ciudad.
- Escuche que se quieren ir a Cuba, no quieren ir a destruir Tenochtitlan.
- ¿Qué ganamos con eso?
- Claro que la hay Hernán Cortes.
- Eres bienvenido a estas tierras.
- Junto con la Malinche.
- Esta bien, yo le digo al Tlatoani, gracias Malinche.
- ¿Qué si usted quiere formar una alianza con Cortes?
- Perfecto Hernán.
- Escucha me bien, iras a quemar las naves, para que no tengan con que ir a Cuba.
- Muy bien lo escucho.
- Hernán Cortes, dijo que quiere tener una reunión con tu Tlatoani.
- Gracias Moctezuma, por tanta amabilidad.
- Hola Moctezuma, me da gusto saludarte, no hay necesidad de tanta reverencias
- Bien, después de tantas peleas, quiero saber si quiere ser mi aliado, para destruir a Teotihuacan.
- Muy bien, quiere ir al grano, perfecto.
- Te quiere hablar de la ciudad de Tenochtitlan.
- Cacique, que usted le cuente.
- Dile Malinche que el señor Hernán Cortes, dijo que muchas gracias y que quiere tener una reunión con Moctezuma.
- Ahora si, puedes decirme que pasa con ese grupo de españoles que me estas mencionando.
- Si supieras que he venido a destruirte.
- Pues están muy equivocados, si piensan que los dejare huir; hiciste bien en decirme.
- No, Cortes ya se volvió loco y muy malo.
- Mmmm, muy bonito, ¿Aquí quien gobierna?
- ¿Ustedes quieren ir con Hernán Cortes, para destruir la ciudad de Tenochtitlan?
- Gobierna el "Cacique Gordo"
- Este es Cempoala.
- Estos tipos, quieren huir y no luchar con Cortes, son unos mal agradecidos.
- Le tengo que decir a Hernán Cortes.
- Sí, supieran que, queremos apoderarnos de estas tierras.
- Jajajaj, si supieran lo que planeo.
- Si, seria algo muy prometedor. Esta unión es algo muy importante.
- Este hombre no es de mucha confianza, se ve que solo quiere apoderarse de todo.
- Esta bien Hernán como digas.
- OH, esta bien dile que muchas gracias, y que le diga a su Tlatoani que quiero reunirme con el.
- Y bien, ¿Se nos une para destruir Tenochtitlan?
- Jajaja, perfecto señor Cortes.
- De parte del Tlatoani Moctezuma, le manda unos regalos en honor a Hernán Cortes.
- Este indígena vino a traerte unos obsequios Cortes.
- Buenas tardes venimos en son de paz, solo queremos recorrer y conocer más riquezas que tienen estos territorios.
- Hernán te tengo que decir algo muy importante sobre un grupo de españoles.
- Déjenos a solas por favor.
- Por su puesto.
- Nosotros, queremos que pelen con nosotros para que puedan seguir recorriendo nuestros territorios y si ganan, también tendrán 20 mujeres como obsequio.
- Jaajajaja, por su puesto.
- Hernán, que quieren destruir la ciudad de Tenochtitlan y de todo lo que ya te dijo sobre esa cuidad, que si quieres ayudarlos a destruir esa ciudad.
- ¿Qué paso? No vez que estamos contentos por la unión con este Cacique y lo vienes a interrumpir con esa cara.
- Jajajaja, que tonto de su parte señor Moctezuma.
- Tal vez debería, pero no vengo a eso, ahora vengo en son de paz.
- Por eso vamos a luchar contra los españoles y los vamos a derrotar.
- Yo Cuitláhuac soy su nuevo emperador, con la muerte de Moctezuma, yo subo como emperador.
- Entonces a que vienes Cortes.
- Así destruirían juntos a ese imperio.
- Como fuiste capas Hernán Cortes de tomarme como prisionero, si te trae con mucho respeto; eres un loco.
- ¡NO!, perdi contra los aztecas, quienes derrotaron a mi equipo de españoles y tlaxcaltecas.
- El sabe que los mexicas son sus enemigos.
- No entiendo lo que me estas diciendo, pero que me importa.
- ¡¡¡Que quiere usted Señor Cortes, después de pelear contra nosotros ahora viene a matar a los que toda vía siguen vivos!!!.
- ¿Qué si vas a matarlos?
- Sí, señor, hay que luchar, contra esos mentirosos e impostores.
- Quiere hablar con el Jefe.
- Bueno pues se que los mexicas son sus enemigos. Así que les conviene estar de mi lado.
- Tienes muchos enemigos, y pues ellos quieren destruir tu imperio, así que me uní a ellos, jaja.
- Estoy contento, porque después de una triste derrota estamos listos para atacar a la gran Tenochtitlan.
- Sí, ahora somos más, y acabaremos con ese gran imperio.
- Claro, ya pueden descansar, solo que estén pendientes.
- Pero no respetaste las ordenes del gobernador.
- Claro que no, pero tienes que ir a Cuba con nosotros.
- Muy bien, ya matamos a los mexicas y cumplimos con lo que nos mando Cortes.
- Pero respete las ordenes de mi Rey.
- Si, señor.
- Hernán Cortes, desobedeciste las ordenes del gobernador Diego Velázquez.
- Ahora ya conocemos mas de estas tierras y hemos hecho buenos tratados con la personas de esta región.
- Por favor Pánfilo Narváez, ¿no quieres pelear o si?
- Si señor Pedro de Alvarado, es hora de descansar, claro sin nos da permiso.
- Mmm, claro que lo hice, necesitábamos llegar cuanto antes a estas tierras, y informarle al rey Carlos I.
- No iré a ningún lado.
- Con tal de destruir al imperio mexica, acepto su alianza.
- Eres un desgraciado, no merecías mis reverencias y obsequios.
- Vengo a hablar con el Jefe Tlaxcalteca.
- Pero me los distes.
- Si quieren podemos destruir ese imperio juntos y destruir así a sus enemigos
- Así se habla.
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