¿Por qué se pone así?, yo siempre le hago muchos favores
Patronio tengo un problema. Hay un hombre al que le hago muchos favores y nunca me agradece, y si no está satisfecho con lo que le doy, se enfada.
Señor conde Lucanor, te contaré la historia de 'Lo que sucedió al Rey Abenabet de Sevilla con Romaiquía, su mujer', ya que te ocurre lo mismo que al rey
El rey Abenabet amaba a su mujer Romaiquía con locura, pero ella era muy caprichosa Un día del mes de Febrero, en Córdoba:
Porque tú nunca me llevas a lugares donde nieva.
¿Por qué lloras Romaiquía?
Esta bien, mandaré plantar almendros en Cordoba para que cuando florezcan, parezca que estén nevados.
Nunca puedo hacer lo que quiero, ni siquiera como aquella mujer del río
No te preocupes, sígueme
¿Qué ocurre?
Otro día, la reina empezó a llorar por otro capricho . El rey le preguntó que que le pasaba y ella dijo que él nunca hacía nada por ella. Tras escuchar esto él vio que ella no apreciaba nada y le dijo: «Wa la mahar aten?»; que quiere decir: «¿Ni siquiera el día de lodo?»;
Descálzate y haz los adobes que quieras
Y como a Don Juan le pareció una buena historia, decidió ponerla en este libro, añadiéndole los siguientes dos versos: Por quien no agradece tus favores, no abandones nunca tus labores.
Gracias Patronio, usaré tu consejo.
Y vos, señor Conde Lucanor, si ese hombre no le agradece, no hagáis nada por él
Sukurta daugiau nei 30 milijonų siužetinių lentelių