Juan es un niño de 12 años que vende dulces en la calle desde los 5 años, el siempre quiso estudiar, sin embargo sus padres no les brindaron esa oportunidad.
Desearía estar estudiando en lugar de vender dulces en la calle.
Juan duerme bajo un puente y sueña que en algún momento pueda encontrar la oportunidad de estudiar y compartir con otros niños de su edad.
Juan se encuentra con Martín, su amigo, y este le comenta de un centro de ayuda para personas de bajos recursos.
¡Hola Juan! hace una semanas encontré un centro de ayuda donde te enseñan cursos gratutitos.
De esta manera Juan y Martín asistieron al centro de ayuda y se inscribieron en los cursos de Carpintería y Computación.
Desde aquel momento, Juan y Martín asistían puntuales a sus clases y siempre se sentaban juntos. Terminaron sus cursos como los más destacados de la clase, ambos estaban muy contentos.
Juan encontró un trabajo como programador en una empresa importante gracias al gran desempeño que realizó en el curso de Computación. La empresa le brindó oportunidades como descuentos del 90% en hospedajes y se le descontaba una mínima cantidad de su salario. De esta manera Juan nunca más volvió a sentir frío y su calidad de vida mejoró.
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