BASADO EN HECHOS REALES:Era un día normal en mi trabajo como socorrista. Cuando mi compañero se dirigía a tranquilizar a los muchachos...
Relajaos!
OH NEEE!
SA MATAO
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A pesar del suelo antideslizante, mi compañero se resbala al pisar un charco e impacta su cabeza contra el piso provocando así una hemorragia. Decido rápidamente socorrer a mi compañero mientras otro socorrista llama a las emergencias.
VOY A POR TIII!!!
PAS: Prevenir, avisar y socorrer- Gracias a actuaciones de prevención como tener una camilla cerca mi compañero es capaz de socorrer con rapidez- Mientras mi compañero se ha lanzado a la piscina a socorrer al herido, mi deber, siguiendo el protocolo, es avisar al servicio médico.- Después pasaré al protocolo de socorrer junto a mi compañero.
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CAMILLA!
NO ERA BUENA IDEA
Analizo la situación y me doy cuenta de que me encuentro ante una hemorragia y un posible traumatismo craneoencefálico. Estabilizo la cabeza y el cuello colocando sus manos en ambos lados de la cabeza del herido. Mantengo la cabeza en línea con la columna y evito el movimiento. Espero a que llegue la ayuda médica y detengo cualquier sangrado presionando firmemente con gasas esterilizadas sobre la herida y bajo ningún concepto tiro las gasas para saber que tipo de sangre tiene el herido.
EN CAMINOOO!
NO ERA BUENA IDEA
Se va a morir....
Mientras el servicio médico termina de atender al herido y prepara la ambulancia para poder llevárselo con seguridad, el socorrista protege la zona para que los paramédicos puedan ejercer su trabajo correctamente.
No os acerquéis
Rápido!
Madre!
Finalmente y gracias a la buena actuación combinada de socorristas y paramédicos, podemos saber que el herido no tiene ningún traumatismo y todo se quedó en un susto.