El elefante es un símbolo de la gente oprimida por el imperialismo británico. El elefante está encadenado pero se libera y sigue su comportamiento natural. Cuando ha gastado sus energías y su venganza, es pacífica. Sin embargo, a pesar de su actitud tranquila y pacífica, es castigada no por sus pecados, sino por los ideales arbitrarios del hombre que sostiene el rifle, que está tratando desesperadamente de aferrarse a su apariencia de poder, al igual que el gobierno despótico.
LA MULTITUD
Los birmanos no son simplemente espectadores de la escena; Actúan como un catalizador para la decisión del narrador de tomar medidas contra el elefante. El narrador sabe que si se pone delante del elefante y no lo carga, entonces el elefante está sobre su rabia; Sin embargo, simplemente alejarse de la multitud sin hacer nada le haría parecer estúpido. Las expectativas de la multitud desafían al ego y la autoridad del narrador, y lo hacen violar su conciencia.