¡Sol vivo! Postrado delante de ti adoro tu marcha...
He allí, Piqui Chaqui, que viene el sabio Huillca Uma; ese león anda acompañado del mal presagio...
Huilca Uma el que todo lo sabe se acerca donde Ollanta y Piqui Chaqui mirando al Dios SOL .
שקופית: 2
Poderoso Ollanta, a tus plantas tienes rendida la comarca: tu valor te bastará para dominar todo.
Ollanta se siente temeroso de ver a Huilca Uma en un día normal.
שקופית: 3
¿Para qué me interrogas increpándome? Todo sé; tú me lo recuerdas.
שקופית: 0
Hablaré, ya que me has visto, poderoso y noble Huillca Uma; te adoro con profunda veneración. Para ti nada hay oculto; veamos que todo ha de ser así.
Calla; no hables, pues ya aquel agorero sabe mejor que tú lo que has dicho.
Tiemblo al verte aquí; como también al presenciar estas cenizas frías, cimientos, adobes, vasos y cestos. Cuantos te ven admiran todo esto. Dime, ¿para qué sirven, si todavía no es la fiesta? ¿Está por ventura enfermo el inca? Tú vaticinas solo por medio de la sangre del tunqui rojo, y está muy lejos el día de sacrificar al Sol y a la Luna. Si aún comienza el mes, ¿por qué hemos de abandonar los goces?