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  • Hace muchísimo tiempo En 1532 Los españoles estaban abordando la plaza de armas de cajamarca en la cual se encontraba atahualpa despues de una guera civil por la sucesion del trono este contaba con unos 80 00 honbres
  • Este al verse un tanto asustado ya que los españoles venian de derrotar a su hermano manda a unos mensajeros a ofrecer cosas para que haya como un tratado de paz para que no les hagan daño al pueblo o a el , ocasiones que llevaron a PIzarro a pensar en todos los tesoros posibles que habian en el Perú.
  • Le traemos esto de parte de el señor Atahualpa
  • .
  • ¿Tendran mas tesoros? loos quiero todos.
  • Atahualpa ya llevaba un tiempo analizando la posibilidad de que tratar de contratar a unos españoles ya que el no pensaba como moctezuma que eran sus dioses gracias a sus espías y por esto el pensaba de esta forma para quie estos españoles contratados puedan robar tecnologia de ellos mismo como los caballos y armas despues los ejecutarian
  • Vamos a hacer...
  • Francisco Pizarro encomendó a Hernando de Soto la misión de ir donde Atahualpa para invitarle a que viniera a cenar con él en Cajamarca. Pizarro fue muy insistente en el sentido de que la invitación debía ser transmitida de manera cortés y pacífica, para evitar malentendidos.
  • QUE SALGA ESE PERRO###
  • (el resto de los jinetes se había quedado a las puertas del campamento, a la expectativa de lo que sucediera). Sin bajarse del animal, Pizarro se dirigió a Soto preguntándole por el motivo de su demora, a lo que este respondió «aquí me tienen diciendo ya sale Atahualpa... y no sale». Hernando Pizarro, muy molesto, le ordenó a Martinillo que llamara al Inca, pero como nadie salía, se encolerizó aún más y dijo:
  • Esperar por favor que ya sale
  • De inmediato, Soto se acercó a la cortina, aún encabalgado, y le presentó la invitación a Atahualpa, aunque este ni siquiera lo miró. Más bien, se dirigió a uno de sus orejones y le susurró algunas cosas. Hernando Pizarro se molestó nuevamente y comenzó a vociferar una serie de cosas que acabaron por llamar la atención del Atahualpa, quien ordenó que le retirasen la cortina. Su mirada se dirigió muy particularmente al osado que lo había llamado «perro». Sin embargo, optó por responder a Soto, diciéndole que avisara a su jefe que al día siguiente iría a verlo donde ellos estaban y que ahí deberían pagarle todo lo que habían tomado durante su estancia en sus tierras.
  • Escuacha ire a donde estan ubicados y ahi nos encontraremos...
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