El Sol y la Luna
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- El Señor de los Caracoles y el Pequeño Dios Sifílitico se retiraron a las montañas y meditaron.
- Tírense a las llamas.
- .El Pequeño Dios Sifilítico tomó impulso y se tiró a las llamas. El Señor de los Caracoles miró la hoguera ardiente, el seño fruncido.Como no se decidía, exasperados, los dioses lo empujaron. Pero antes de que se elevara en el cielo, los dioses, furiosos, lo abofetearon .
- Fue así que el arrogante Señor de los Caracoles se volvió la Luna. Las manchas de la Luna son las cicatrices de su castigo.
- El Pequeño Dios Sifilítico resurgió enseguida después y se elevó, incandescente, en el cielo.Pero el Sol resplandeciente no se movía.
- - Por qué no te mueves?
- Porque yo quiero la sangre y el reino
- Este quinto Sol, el Sol del Movimiento, iluminó a los toltecas e iluminó a los aztecas. Tenía garras y se alimentaba de corazones humanos.
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