En aquel momento apareció un hombre venerando, de aspecto varonil y noblemente vestido.
2. Precisamente porque tales cosas te parecen imposibles, debes hacerlas posibles con la obediencia y la adquisición de la ciencia
¿Quién sois vos, que me mandáis una cosa imposible?
1. No con golpes, sino con la mansedumbre y con la caridad deberás ganarte a estos tus amigos. Ponte ahora mismo, pues, a instruirlos sobre la fealdad del pecado y la belleza de la virtud.'
Libisema: 2
Observé a los niños convertidos en animales, y me pregunté, ¿qué puedo hacer?
En ese momento, junto a Él, vi a una mujer de aspecto majestuoso, vestida con un manto que resplandecía por todas partes.
Mira.!!
He aquí tu campo, he aquí donde tienes que trabajar. Hazte humilde, fuerte, robusto; y cuando veas que ocurre ahora con estos animales, lo deberás hacer tú con mis hijos.
Libisema: 3
Ahora en vez de animales feroces, aparecieron otros tantos mansos corderos que, saltando y bailando, corrían todos alrededor como si festejaran al hombre ángel y a la señora.