Más de 800 mujeres se reúnen de forma espontánea en la Alameda de Colón y marchan en manifestación por las calles de Málaga, pidiendo la bajada de los precios de las subsistencias.
LAS MUJERES EN LUCHA
¡ABAJO LA CARESTÍA DE LAS SUBSISTENCIAS!¡MUERAN LOS ACAPARADORES!¡VIVAN LAS MUJERES UNIDAS!¡QUEREMOS EL PAN A 40 CÉNTIMOS!¡VIVA MÁLAGA!
Las faeneras convocan una reunión de mujeres en el local de las Juventudes republicanas, a la que asisten 2.000 mujeres dentro del local y 6.000 se tuvieron que seguir la reunión desde la calle. Allí hablaron de sus próximas actuaciones.
LA TRAGEDIA
Durante estos días las faeneras se reúnen en varias ocasiones con el Alcalde y el Gobernador Civil, para hacerles saber cuales son sus reivindicaciones. Ambos las atienden educadamente, pero sus promesas de hacer algo para solucionar el problema quedan vacías por la presión de la burguesía malagueña.
CRESPONES NEGROS
Ante la inacción de las autoridades, las mujeres deciden actuar de forma más enérgica, en el mercado se hacen con el control del pescado y las patatas que iban destinados a la exportación. Las venden a precios justos, dando lo recaudado al Gobernador Civil.
Las obreras malagueñas continúan con sus movilizaciones, acompañadas por los obreros que apoyan sus reivindicaciones. El Gobernador Civil responde mandando a la Guardia Civil a caballo, que arremete con gran violencia contra la multitud. El 15 de enero deja un balance de 4 muertos (dos mujeres y dos hombres) y numerosos heridos entre los manifestantes.
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Los balcones se llenan de crespones negros en señal de duelo. El gobierno envía al ejército para controlar la situación. Los malagueños y malagueñas con sus protestas consiguen que dimita el Gobernador Civil. El lunes 21 de enero los manifestantes vuelven al trabajo, apenas consiguen una pequeña reducción del precio de las subsistencias.