Érase una vez, en un pequeño pueblo del país Vasco, la tranquilidad se respira en el aire hasta que una autoridad del pueblo toma una decisión inesperada...
¡Denme sus tierras!
El noble Edwin, quien ostenta el rol de brindar bienes a los ciudadanos, en su anhelo por poder, amenaza con arrebatarle las tierras a los campesinos para ampliar su dominio.
Es hora de expandirme...
Sir Edwin posee muchas tierras en la región Vasca y busca ampliarse, junto a sus mil soldados, por toda la península Ibérica
¡Ese noble malvado no se saldrá con la suya!
Pero en ese momento de inquietud, confusión y agonía, un jóven, llamado Cristiano Ronaldo, decide enfrentarse al noble Edwin para reclamar justicia y defender a su familia.
NO SALGANDE SUS CASAS
Pero en ese momento de inquietud, confusión y agonía, un jóven, llamado Cristiano Ronaldo, decide enfrentarse al noble Edwin para reclamar justicia y defender a su familia.
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¿Qué? Vayan a buscarlo, ¡Ya!
Los campesinos se escondían en sus casas, las patrullas de Sir Edwin merodeaban por las calles, nadie se atrevía a hablar. Es entonces cuando el joven Ronaldo, con un grito a cuatro vientos retaba al noble Edwin...
El noble recibe el mensaje e inicia la búsqueda del plebeyo. Ronaldo sabe que el solo no podrá contra Sir Edwin. Por eso, el joven va a pedir ayuda a un amigo suyo.
¡Ea! Noble sir Edwin, que vosotros pensáis que el poder no atiende a los bienes del pueblo... búsqueme ya que el miedo se deshaga de su alma y enfrénteme bajo las penumbras del pueblo que agoniza.
Sir Edwin, hay un joven plebeyo que lo está retando...
Sir Edwin y Cristiano Ronaldo se encuentran cara a cara en medio de la plaza principal. Al noble lo respaldan sus soldados mientras que el plebeyo Ronaldo es respaldado por Leo Messi y el clero local.
Leo Messi, amigo de Ronaldo, con su sabiduría en hierbas medicinales, ayuda a Ronaldo a prepararse para el desafío. Juntos, elaboran un plan para convencer al clero local de la injusticia del noble.
Hoy si, ¡No te escondas!
Pss... Pss...
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La valentía de Ronaldo y la inteligencia de Messi conmueven a los habitantes del pueblo y todos se unen en resistencia contra Sir Edwin.
El noble, sorprendido por la determinación del pueblo, desiste de sus planes y se retira avergonzado. La comunidad celebra la victoria y reconocen a Ronaldo y a Messi como héroes locales.