La tierra es nuestra hermana. La cultura del descarte excluye a las personas y genera basura. Es indispensable el contacto con la naturaleza. El ser humano y el ambiente se deterioran juntos.
<<Laudato si’, mi’ Signore» – «Alabado seas, mi Señor»
La tierra no pertenece a los humanos. El hecho de ser creados a imagen de Dios y del mandato de dominar la tierra no nos otorga un absoluto dominio sobre las demás creaturas.
El origen de muchos de los problemas de la actualidad proviene de la tendencia moderna con la comprensión absoluta de todo concepto. Algo imposible en realidad.
El humanismo es una necesidad actual, ya que integra y une a los diferentes saberes. Los problemas ambientales son inseparables de la sociedad.
A pesar de nuestra inter dependencia, inteligencia y enorme desarrollo tecnológico, no se ha podido formar un acuerdo para contrarrestar los problemas ambientales.
Si queremos corregir nuestro camino, debemos recordar las enseñanzas de Francisco de Asís
<<Alabado seas, mi Señor, por la hermana nuestra madre tierra, la cual nos sustenta, y gobierna y produce diversos frutos con coloridas flores y hierba>>