La Noche Boca Arriba - La Realidad
Текст на Статията
- La Selva
- ¡Tengo que huir y tengo miedo de que me capturen los aztecas!
- El Ataque de Los Aztecas
- ¡Estoy herido y me rindo!
- La captura del hombre
- ¿Seré capaz de salir de aquí? Tengo mucho miedo y no quiero que me sacrifiquen.
- El hombre llega a un mundo diferente, pero cree que está soñando. Ahora, él está en una selva muy grande con árboles grandes que tienen olores diferentes. Sin embargo, él nunca había olido en un sueño antes de queapareciera en este mundo azteca. Pero el hombre no está solo en el medio de la selva; si no corre, los aztecas lo perseguirán y lo cazarán.
- La caminata al templo azteca
- Creo que este es el final para mí. Estos aztecas me van a sacrificar y no hay manera de que pueda escapar. Este será mi último día con vida.
- Las guerras floridas habían comenzado en la selva y el hombre comenzó a huir. Él sabía que a los aztecas les gustaba hacer sacrificios humanos y no querría ser su víctima. De repente, apareció un grupo de aztecas y lo atacó. El hombre trató de defenderse, pero fue derrotado y capturado por ellos.
- El comienzo de su muerte
- El hombre se durmió en una habitación oscura. Cuando despertó, sintió las cuerdas alrededor de su muñecas y manos. Los aztecas lo ataron con cuerdas a una plataforma de losas de piedra. También, el hombre se dio cuenta de que los aztecas le habían quitado su amuleto de manera que no rezara a los dioses.
- La muerte del hombre
- De repente, la puerta de la habitación se abrió y cuatro acólitos aztecas entraron con antorchas. Luego, los acólitos lo llevaron al templo azteca mientras sostenían antorchas para iluminar el camino. Mientras lo cargaban, el hombre estaba boca arriba en el cielo nocturno mirando las estrellas. El hombre sabía que moriría pronto y que solo le quedaban unos momentos más para vivir.
- Cuando los acólitos llegaron al templo, comenzaron a subir los escalones hacia la cima de la pirámide. El hombre quería volver al hospital y trató de abrir y cerrar los ojos, pero no pudo volver a su cama. Si el mundo azteca fueraun sueño, entonces el hombre despertaría en la cama del hospital. Es lamentable que el mundo azteca no sea un sueño; en cambio, es la realidad.
- ¿Por qué no puedo volver al hospital? Esto definitivamente no es un sueño y seguramente moriré.
- En los momentos finales de su vida, el hombre decidió abrir los ojos. Sabía que no había forma de escapar del sacrificio y vio la imagen de un sacerdote azteca con un cuchillo de piedra en su mano. El hombre estaba boca arriba y mirando al cielo por última vez cuando el sacerdote levantó el cuchillo hacia él. Este fue el fin de su vida.
- ¡NO, el sacerdote tiene un cuchillo! ¡No puedo creer que estoy a punto de morir!
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